Yegua

Algunas noches Soy fácil , No acato límites . . .

Cómo aprendemos a cambiar, a aceptar ser algo que no éramos, a aferrarnos tanto a la idea que tenemos de nosotros mismos hasta llegar al punto en que pierdes el rumbo, y te caes.

Despedidas iguales a las de otros días pero con el sabor característico de las últimas veces.

Y yo que siempre quiero lo que no puedo tener, hoy sí recuerdo ese rostro de niño perverso que ayer me costaba tanto ver tras mis ojos.

Todo pasa tan rápido que no da tiempo de ponerse casco y rodilleras...todo estalla de repente y en el frenesí de múltiples batallas olvidé qué estaba buscando.

Y no importó, hasta que anoche cualquier pequeña cosa me hizo recordar...

Y el golpe fué tan fuerte que alcanzó a quienes están cerca.

Se fué con mucho mucho miedo.

Y a una parte de mi, sigue sin importarle absolutamente nada.

Escuchar, callar, asentir, olvidar.

No esperar


Hoy quizá , la sutileza me guardo un rescate
Me fuí avivando en otro par de escapes,
Me vine sabio en boicotear . . .
Con el tiempo fuí aprendiendo a ser robot
Era programable en cuestiones del amor
Y en la misma fantasía , me fundía y me reía de los dos ,
Perdido estoy , perdido estoy , perdido estoy todos saben quien soy.

Ear: Babasónicos.- Yegua

Mi historia de No-amor

Descubrir en otra voz aquello que rehusé escuchar de ti después de intuirlo todo éste tiempo.

Pensar en lo absurdo que resulta decir todo éste tiempo.

La sorpresa de sentirme aletargada en lugar de cualquier otra cosa.

Para después comprobar que cada vez me cuesta más trabajo sentir.

Y al final, decidir que no importa, que no puede (no puedo) ser de otra manera.

Me da igual, quiero verte.