domingo, enero 08, 2006

Enséñame...

A ocultar la tristeza que asoma a mis ojos cuando llegas
A controlar el temblor de mis manos cada que las tuyas rozan mi piel
A gritar tu nombre con todas mis fuerzas, para ver si el viento se lo lleva

A callar, a detener las lágrimas, a levantarme a otro día de estar sin ti.

Curioso asunto éste vacío... tiene tu nombre