lunes, julio 24, 2006

Cuando encontramos música

Dan ganas de salir a buscar un corazón, que no tenga costuras ni esos pequeños agujeritos por donde escurre la indiferencia. Que sea nuevo y se deje amar, que no guarde recuerdos de viejos rencores y amargas despedidas, que tenga lugar solo para ti. Jamás reparado, nunca pisado y por tanto sin huellas de tristeza y abandono.

Si lo encontrase, lo envolvería en papel brillante y volvería corriendo hacia donde esperas con la sonrisa en los ojos y las manos abiertas...

Pero es tarde, la lluvia y la fiebre no me dejarán ir muy lejos. ¿Ahora? Mis manos están vacías...verás, hace tiempo un niño descuidado lo extravió por ahí, y solo encontré trozos tan minúsculos que aún no termino de pegar...está en retazos impresentables, lleno del silencio que sigue a la ausencia, con los enormes rasguños de la soledad...